La ventaja de Red Sox en la Serie Mundial, es ahora de 3-1 (recordando que es al mejor de siete). Cuando un equipo se pone en ventaja de 3-1 en la Serie Mundial, ha terminando ganando el 86,7% de las veces, coronándose 39 veces de 45 oportunidades
La ventaja de Red Sox en la Serie Mundial, es ahora de 3-1 (recordando que es al mejor de siete). Cuando un equipo se pone en ventaja de 3-1 en la Serie Mundial, ha terminando ganando el 86,7% de las veces, coronándose 39 veces de 45 oportunidades
El sábado 28 de octubre se jugó en el Dodger Stadium el cuarto juego de la Serie Mundial. Después del partido más largo en la historia de la Serie Mundial (el juego 3), Red Sox se recuperó y volvió a la victoria, poniéndose a pique de coronarse en la Serie Mundial. La ventaja de Red Sox en la Serie Mundial, es ahora de 3-1 (recordando que es al mejor de siete). Cuando un equipo se pone en ventaja de 3-1 en la Serie Mundial, ha terminando ganando el 86,7% de las veces, coronándose 39 veces de 45 oportunidades.
El juego 4 de la Serie Mundial empezó con un pitcheo dominante de Eduardo Rodríguez para Red Sox y Rich Hill para Dodgers, pero en la baja de la sexta Rodríguez se metió en problemas, y Yasiel Puig terminó conectando un homerun de tres carreras, que sumada a la que ya había anotado Turner segundos antes por el error de Vázquez le dio una buena ventaja a Dodgers. Los Red Sox se acercaron en el séptimo con un cuadrangular de tres carreras.
En el octavo, igual que en el juego 3 de la Serie Mundial, el mánager de Dodgers Roberts volvió a traer a su cerrador Jansen, quien el día anterior había recibido un homerun que en su momento empató el partido, y de nuevo, la historia se repitió, ya que un batazo de cuatro esquinas de Steve Pearce volvió a empatar el encuentro. El noveno inning de Red Sox fue un desastre para Dodgers, recibiendo hasta cinco carreras que sentenciaron definitivamente las cosas a favor de Boston, siendo clave un doblete de Pierce que trajo tres carreras más.
Con Kimbrel en la lomita y una ventaja de cinco carreras en el noveno inning, ni un homerun de dos carreras de Kike Hernández sin outs pudo devolver a la vida a Dodgers, maquillando el marcador final para un 9-6 a favor de Red Sox. Este domingo, de nuevo en Dodger Stadium, los Boston Red Sox podrían coronarse campeones de la Serie Mundial con una victoria. El abridor para Red Sox será Chris Sale, mientras que por los Dodgers estará Clayton Kershaw.